Revelan los genes que marcan la edad de la menopausia

por Revista Ginecología y Obstetricia
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Siempre se ha dicho que la edad a la que viene la regla o llega la menopausia depende de la genética. Si tu madre tuvo una menopausia tardía, probablemente tú sigas el mismo camino.

Pero más allá de la referencia materna, no hay una herramienta clínica que permita saber la edad a la que finaliza la vida reproductiva de la mujer.

Cuando los ovarios dejan de trabajar descienden en picado los estrógenos, hormona clave en muchos aspectos de la salud de la mujer (cardiovascular, ósea…).

Así pues, conocer con exactitud en qué momento va a producirse la menopausia sería de gran ayuda para un envejecimiento saludable ya que contribuiría a prevenir problemas de salud.

Ahora, un equipo internacional de científicos de más de 180 instituciones codirigidos por investigadores de la Universidad de Exeter, la Universidad de Cambridge, la Universidad de Copenhague y la Universitat Autònoma de Barcelona ha dado un gran paso en este sentido al identificar cerca de 300 variantes génicas que influyen en la duración de la vida reproductiva de las mujeres.

RESERVA OVÁRICA

La esperanza de vida ha aumentado drásticamente en los últimos 150 años. Sin embargo, la edad a la que la mayoría de mujeres pasan por la menopausia de manera natural se ha mantenido relativamente constante en los 50 años aproximadamente.

  • La mujer nace ya con un reserva ovárica concreta (folículos de óvulos). De hecho, esa reserva ovárica tiene su punto álgido cuando está en el útero de la madre, concretamente en el quinto mes de embarazo.
  • En ese momento hay unos dos millones de folículos. Y a partir de ahí el ovario ya empieza a perder folículos. Al nacer, esos dos millones que había en el quinto mes de gestación se han quedado en medio millón.
  • Y la pérdida es constante y gradual. Así, la menopausia se produce una vez han desaparecido la mayoría de estos folículos de óvulos, aunque la fertilidad natural disminuye sustancialmente antes.

GRAN ESTUDIO

La investigación internacional codirigida por la UAB y publicada en Nature supone un antes y un después en el conocimiento de los genes que influyen en la duración de la vida fértil de la mujer.

  • Hasta ahora solo se conocían 56 variaciones genéticas implicadas. Este estudio ha identificado hasta 290 distintas.

Variaciones genéticas que dan pistas certeras acerca del número de óvulos con los que nace la mujer y también a la velocidad con la que se pierden.

Estos hallazgos han sido posibles gracias al análisis de datos de cientos de miles de mujeres procedentes de grandes bancos de datos como el Biobank de Reino Unido.

GENES IMPLICADOS EN LA FERTILIDAD

El equipo de investigadores descubrió que muchos de los genes implicados en la duración de la vida fértil de la mujer están relacionados con procesos de reparación del ADN.

También encontraron que muchos de estos genes están activos desde antes del nacimiento, cuando se crea la reserva de óvulos en la mujer, pero también a lo largo de la vida adulta.

Un ejemplo son los genes CHEK1 y CHEK2, que regulan una amplia variedad de procesos de reparación del ADN.

  • Los investigadores eliminaron en ratones el gen CHEK2 para que deje de funcionar y sobreexpresaron el CHEK1 para aumentar su actividad, lo que aumentó un 25% la duración de la vida reproductiva en los ratones.

Es cierto que la fisiología reproductiva del ratón es muy diferente a la de la mujer porque para empezar los ratones no tienen menopausia.

  • Sin embargo, el estudio también examinó la aparición de la menopausia en mujeres que de forma natural no tienen el gen CHEK2 activo y encontraron que llegan un promedio de 3,5 años más tarde a la menopausia que las mujeres que sí lo tienen activo.

Así resume el profesor Ignasi Roig, responsable del equipo del Instituto de Biotecnología y Biomedicina de la UAB, el hallazgo:

  • “Las hembras con más producción de CHEK1 nacían con más óvulos y por tanto estos tardaban más en agotarse de manera natural, alargando así la vida reproductiva. Esto sugiere que la actividad del gen CHEK1 protege los óvulos”.
  • “Por el contrario, cuando eliminamos el gen CHEK2, las hembras nacían con el mismo número de óvulos, pero éstos tardaban más tiempo en agotarse. Así pues, la activación de CHEK2 puede causar la muerte de óvulos durante la vida adulta de los ratones”.

UTILIDADES DEL HALLAZGO

Los genes identificados en este trabajo influyen en la edad de la menopausia natural y también se pueden utilizar para ayudar a predecir qué mujeres tienen más riesgo de menopausia precoz.

De hecho, podría saberse desde la juventud, lo que sería útil para planificar embarazos.

El equipo también examinó el impacto que tiene para la salud de la mujer el hecho de que la menopausia llegue antes o después:

  • Encontraron que una menopausia temprana aumenta el riesgo de diabetes tipo 2 y está relacionada con una peor salud ósea y un mayor riesgo de fracturas.
  • Pero no todo es negativo, una menopausia temprana disminuye el riesgo de algunos tipos de cáncer, como el de ovario y el de mama, que se sabe que son sensibles a las hormonas sexuales.

Fuente: Saber Vivir

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