Una nueva técnica de imagenología o método de imagen para rastrear el flujo sanguíneo materno a la placenta tiene el potencial de ayudar a diagnosticar varias complicaciones comunes en el embarazo temprano. Así lo afirmó un estudio financiado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de los Estados Unidos.
Los investigadores usaron la técnica conocida como imagenología de resonancia magnética de rotulación arterial pseudo-continua (RMN pCASL). Con esta identificaron a las mujeres con flujo sanguíneo placentario reducido que luego desarrollaron una o más complicaciones. El estudio fue realizado por Sherin U. Devasker, M.D., de la Universidad de California en Los Ángeles, y colegas. Aparece en el Journal of Magnetic Resonance Imaging.
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Placenta y flujo sanguíneo
Al principio del embarazo, las células de la placenta hacen que las arterias uterinas se ensanchen, aumentando el suministro de sangre materna. Se cree que el hecho de que estos vasos sanguíneos no se agranden lo suficiente causa una serie de complicaciones potenciales. Para el estudio, los investigadores clasificaron estas complicaciones como enfermedad placentaria isquémica (EPI). Esta incluye preeclampsia (un trastorno de presión arterial potencialmente mortal), restricción del crecimiento intrauterino (incapacidad del feto para crecer normalmente) y nacimiento prematuro.
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Imagenología de resonancia magnética de rotulación arterial pseudo-continua (RMN pCASL)
Los investigadores examinaron las placentas de 69 mujeres, primero a las 14 a 18 semanas de embarazo y luego a las 19 a 24 semanas. A diferencia de otras tecnologías para visualizar la placenta, la RMN pCASL puede distinguir la sangre materna de la sangre fetal. Un total de 15 embarazos fueron identificados finalmente con una o más afecciones de ENI.
El método puede proporcionar una manera de diagnosticar a las mujeres en riesgo de enfermedad placentaria isquémica al comienzo del embarazo. El financiamiento para el estudio fue proporcionado por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver (NICHD) del NIH. Esto como parte de su Proyecto de Placenta Humana, un esfuerzo de investigación para entender el papel de la placenta en la salud y la enfermedad.