Las plantas medicinales se han utilizado a través de los años para aliviar las molestias que con frecuencia presentamos las mujeres, asociados a las alteraciones hormonales, la candidiasis o la osteoporosis. Adicional a esto, pueden ser beneficiosos para otras afecciones como la ansiedad, la jaqueca, estreñimiento, entre otros.
Infusión de valeriana: disminuye el insomnio.
La valeriana permite relajar los músculos y contribuye a un sueño más profundo y reparador. En algunas ocasiones es recomendada para tratar la irritabilidad, la hipertensión, la indigestión, las cefaleas y algunos síntomas asociados a la regla y/o menopausia.
Infusión de salvia: recomendada para la fatiga
La fatiga puede presentarse a cualquier edad de la mujer, pero atenuarse en la menopausia y en la vejez. La salvia también puede disminuir las alteraciones hormonales de la menstruación y los sudores nocturnos.
Evítala si estás recibiendo tratamiento con estrógenos, si estás embarazada y la amamantando.
Infusión de hinojo: regulador del flujo menstrual
Es una excelente infusión para contrarrestar el estreñimiento. Adicional a esto, ayuda a regular el flujo menstrual y aliviar los espasmos musculares. Para las mujeres en etapa de menopausia, permite mejorar la retención de líquidos, gases, sofocos y sudores nocturnos.
Debe evitarse su consumo en tratamientos con estrógenos, el embarazo y lactancia. No debe administrarse en niños menores de 12 años.
Infusión de mijo de sol: beneficioso en la menopausia
Es utilizado para aumentar la orina, y previene la aparición de cálculos renales, de manera que disminuye el riesgo de vejiga inflamada. También estimula la producción de hormona luteinizante y favorece la fertilidad femenina.
Los expertos lo prohíben en el embarazo, lactancia y en la presencia de enfermedades del hígado o la tiroides. El uso nunca debe ser prolongado.
Viburno: disminuye los dolores menstruales y las várices
Esta planta es rica en ácido salicílico, cumarinas y flavonoides, especialmente las ramas. Es muy útil para las mujeres, porque disminuye la intensidad de los cólicos menstruales, cefaleas, calambres en las piernas, entre otros.
Evítala en caso de que presentes alergia a los salicilatos, hemorragias activas o uses medicamentos anticoagulantes.